¿Cuántos invitados componen una boda íntima?
Si sois de los que habéis decidido:
Opción A.- boda íntima des de un inicio / (vuestra única opción).
Opción B.- boda íntima 2020 fiestón 2021 / (opción elegida).
Opción C.- boda íntima, después del coronavirus / (opción nueva).
Opción D.- boda íntima sí o no / (aún no lo tenéis claro).
Estáis en el lugar adecuado, sea cual sea vuestra opción elegida; ya que vamos a hablar del primer punto a tener en cuenta cuando nos planteamos: cómo organizar una boda íntima. Y este primer punto son los invitados.
Pero primero de todo, ¿qué es una boda íntima? Nos referimos a una boda íntima cuando hablamos de ¿cuántos invitados la componen? Exacto, realmente la definición de una boda íntima es el número de invitados.
Aunque nos podemos encontrar con definiciones que las limitan a un máximo de: boda íntima 15 personas, boda íntima 20 personas o incluso boda íntima 60 personas y boda íntima 70 personas. Con lo que, basarnos solo en él número de invitados para definir si se trata de una boda íntima o no, para mí, es un dato que realmente no aporta mucho valor.
Lo que sí aporta valor y mucho, es decidir como queréis celebrar vuestra boda. Ya que no hay una forma correcta de celebrar una boda, ni un número exacto de invitados.
Sois vosotros los que tenéis que decidir, si queréis una celebración con muchos invitados, o una celebración más pequeña, con pocos invitados.
Hablar de si un tipo de celebración es más o menos emocionante tampoco lo encuentro correcto. No es el número de invitados el que le da o no emoción a vuestra boda, si no que sois vosotros, y como decidáis vivirla, lo que la convierte en emocionante.
Si continuáis leyendo este post, no os voy a convencer de que celebrar una boda íntima sea la mejor opción del mundo, ni por supuesto la peor.
Aquí solo vamos a hablar de las bodas íntimas, y hoy, del número de invitados a este tipo de enlaces.
A partir de aquí, la decisión es solo de quién decide, o sea vosotros, más allá de tradiciones, convencionalismos, creencias y gustos personales.
Aunque parece que ante la llegada del COVID-19 a nuestras vidas, este tipo de celebraciones se van a ir extendiendo en los próximos meses; hasta que no se encuentre una vacuna para esta pandemia. Teniendo que incorporar a estas celebraciones todas las medidas de seguridad, para asegurarnos siempre una boda con garantia. Mediante distanciamiento social, gel hidroalcohólico, mascarillas en toda la celebración…, ¿pero?
¿A quién invitar a una boda íntima?
Para responder a esta pregunta, antes que todo tenemos que decidir si queremos invitar a nuestra familia directa y amigos, o solo familia directa; pactando con nuestra pareja dónde consideramos el límite. Padres y hermanos, ¿incluimos también tíos y primos? Valoremos en este punto la relación que existe con ellos. Realmente son importantes para nosotros. ¿Concebimos nuestra boda sin ellos?
¿Amigos? Planteémonos las mismas preguntas. No digo que está sea una decisión fácil. Más aún, cuando un miembro de la pareja puede pensar, o tener una relación más profunda con unos que otros, y el otro miembro de la pareja no. Llegar a un primer acuerdo será primordial para avanzar.
Y demos gracias a que no tendremos que hablar de familiares lejanos, compañeros de trabajo o compromisos, que no nos apetece invitar.
Ya no se llevan los protocolos que van en contra del estilo de vida de los novios, los compromisos por el que dirán y el quedar bien con todo el mundo.
Una vez hablado este primer punto lo primero que debemos hacer es una lista de invitados cada uno, a nuestra boda. Una lista que después pondremos en común como pareja.
¿Con que nos podemos encontrar al descubrir nuestra lista de invitados al otro miembro de la pareja?
Con que, por mucho que los dos hayamos tenido en cuenta las mismas decisiones, una lista de invitados sea mucho mayor que el del otro miembro de la pareja; ya sea por número de familia, o amigos realmente importantes.
Si realmente las dos listas contienen las personas significativas e importantes para nosotros, no lo debatiremos con nuestra pareja; cada cual ha decidido las personas con las que queremos compartir nuestro día. Convirtiendo estas dos listas en nuestra lista única de invitados.
Si está lista consideramos que es muy extensa, y no queremos renunciar a nuestra idea de boda íntima, podemos optar por celebrarla en dos partes. Una con los familiares más allegados y otra celebración para los amigos. Recomiendo eso sí, que sea en dos días diferentes como mínimo. El día de la boda pasa muy rápido, así que, cuanto más tiempo dure, más momentos podréis vivir y conservar para el recuerdo.
Una vez decidida vuestra lista de invitados para una boda íntima, informad a vuestra familia del tipo de boda que queréis celebrar. Tanto para quienes van a asistir como para los que no, es importante que sepan cuáles son vuestras intenciones, siempre exponiéndolas con naturalidad y honestidad, seguro que lo entenderán.
Las bodas se reducen a su esencia misma. El amor entre dos humanos y su compromiso mutuo.
Si realmente lo que para vosotros es importante es la interacción con vuestros invitados, el número de personas será decisivo para poder interactuar más o menos, con ellos. Pero pensad si esto es una ventaja o no para vosotros. Dependiendo solo del valor que le deis a poder disfrutar con cada invitado.
Seguramente pasará que, si invitáis solo aquellos con los que más relación tenéis, habrá muchas más conexiones y cercanía entre los invitados. Generando un ambiente que fluirá natural y alegre.
Incluso, no solo los invitados se sentirán más a gusto, también las fotografías de vuestra boda íntima, serán más personales y significativas.
Espero que os haya gustado este post y ver aquí vuestros comentarios, gracias.
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